lunes, 14 de noviembre de 2011
Golpes de Mercado en Grecia e Italia
martes, 15 de febrero de 2011
Las mujeres contra Berlusconi

lunes, 3 de enero de 2011
Novecento: la revolución y nosotros, que la quisimos tanto

Novecento.
martes, 16 de marzo de 2010
La izquierda europea se despereza

Unas doscientas mil personas se manifestaron en Roma convocadas por todo el arco político de las izquierdas italianas, desde los social-liberales hasta la extrema izquierda extraparlamentaria, para gritar ¡basta! al modo en que el berlusconismo está precipitando a Italia en la sima de una nueva República de Saló, en la que ya no faltan ni los esquadristi aterrorizando minorías y persiguiendo adversarios políticos. El país se encamina a marchas forzadas a un escenario de preguerra civil, en el que reaparecen los signos públicos de la famosa "estrategia de la tensión" de los años 60 y 70, mediante la cual los sectores más extremistas de la derecha italiana buscarían "todo el poder" para sí, más allá de las fórmulas formalmente democrático-parlamentarias. La respuesta desde la izquierda no puede ser otra que la confrontación pacífica pero firme en el Parlamento y en la calle; habida cuenta la inanidad de la izquierda parlamentaria italiana, parece lógico que los ciudadanos estén comenzando a salir a la calle para frenar el asalto fascio-berlusconiano al Estado.
En Francia el escenario discurre por contra y afortunadamente en términos parlamentarios y de confrontación puramente ideológica. Es evidente que la situación allí no tiene los perfiles dramáticos que presenta Italia. En ese marco civilizado, las elecciones regionales francesas han venido a confirmar empero dos tendencias opuestas: de un lado la marginación política voluntaria de entre un tercio y la mitad del electorado, según consultas, algo muy grave a medio plazo para la continuidad misma del sistema democrático; del otro, el que entre la mitad de la sociedad políticamente consciente parece crecer la idea de que la izquierda debe regresar a la primera línea de la política, antes de que el neoliberalismo sarkozyano acabe con el Estado por vías distintas a las del berlusconismo, pero finalmente no menos ciertas y eficaces.
Son los electores de izquierda quienes han puesto al PS francés en libertad vigilada, sin acabar de fiarse de él, por ser la única fuerza de izquierdas que puede aspirar a gobernar las instituciones; quienes han dado alas a esta versión 2.0 de los Verdes que es Europe Ecologie, una formación reciente que traspasa el marco tradicional de este tipo de fuerzas y va más allá de las reivindicaciones ecologistas; quienes han dado un frenazo considerable a las expectativas del Front de Gauche, que sigue dudando entre hacer de conciencia izquierdista del PS o volar buscando un espacio político propio a la izquierda de socialdemócratas y ecologistas; y los que en fin han liquidado el Nuevo Partido Anticapitalista de Olivier Besancenot, quien ha pagado durísimamente el infantilismo y las insensateces de una fuerza política que tantas expectativas generó con su aparición, y que ahora se ve abocada a integrarse en el Front de Gauche o a desaparecer (aunque sin el menor menoscabo de las posibilidades que tiene Bensancenot de, tal como tengo escrito de hace algún tiempo, llegar a ser líder del PS de aquí a 10 ó 15 años y presidente de Francia un poquito después).
La "era Sarkozy" toca a su fin. El repunte del FN es signo de la inquietud existente entre la derecha francesa, incómoda a la búsqueda de sí misma. La tentación autoritaria, la misma a la que ha sucumbido ya la derecha italiana, es muy fuerte. Pero en la derecha francesa hay una tradición antifascista que proviene del gaullismo y hunde sus raíces en la Resistencia contra la ocupación nazi y los traidores colaboracionistas del período 1940-1944. La batalla en Francia es política y no pone en riesgo la democracia y las instituciones, al contrario ayuda a profundizar y avanzar en ellas; en Italia por contra lo que está en juego es si los camisas negras, verdes, pardas y demás ralea van a conseguir subirse sobre el Estado o se les va a cerrar el paso, si hace falta defendiendo la democracia en las calles con métodos proporcionados a la agresión colectiva que está sufriendo el pueblo italiano.
lunes, 10 de agosto de 2009
Las rondas fascistas italianas

Los integrantes de las rondas italianas ya han sacado a pasear “camisas verdes” (los fascistas “postmodernos” de la Lega Norde) y “camisas negras” (los fascistas rancios de Alleanza Nazionale). En el Partido Podrido (PP) español deben estar verdes de envidia. O negros. O más bien, azul mahón, el color de los falangistas.
¿Se imaginan a Montoro, Arenas o Álvarez Cascos con camisa azul mahón patrullando las calles para dar seguridad a nuestras mujeres y nuestras hijas?. Sería como en el chiste del cura gallego, al que una muchachita aldeana le dice en confesión que el cacique del pueblo la anda acosando porque quiere su virginidad: “date por jodida, hija mía”, le contesta el cura.
En fin, que al menos en Italia habrá que volver a sacudirle el polvo a estos mierdas con otro escarmiento al estilo del que recibieron entre 1944 y 1945, cuando el primate que los lideraba acabó colgado cabeza abajo en un mercado público en Milán.
martes, 24 de febrero de 2009
La Mafia, entre la realidad y la literatura

martes, 10 de febrero de 2009
Eluana ya es libre

lunes, 12 de enero de 2009
Si Dios existe, todo está permitido

viernes, 6 de junio de 2008
Europa legaliza la caza del inmigrante

martes, 15 de abril de 2008
Adiós a la izquierda italiana

domingo, 16 de marzo de 2008
Franco Battiato, lejos del coro de las sirenas

Sus letras son en ocasiones de una gran plasticidad, como en "Despertar en primavera":
La presencia de la artillería
en países meridionales
unidos en la lucha extranjera
bajo el reino de las Dos Sicilias.
Y los movimientos predecibles
de la tropa y falsas batallas,
olores de pólvora, de fuego
y voces del Estrecho de Mesina.
Sentimiento oculto para mí.
Me enamoré siguiendo el ritmo del corazón
y me desperté en Primavera.
Otras bucean en la intimidad del alma humana, como en "Nómadas":
Nómadas que buscan los ángulos de la tranquilidad,
en las nieblas del norte, en los tumultos civilizados,
entre los claros oscuros y la monotonía de los días que pasan.
la encontrarás,
la encontrarás
al final de tu camino.
los idiotas del horror.
He oído los disparos en una vía del centro.
Cuánta estúpida gallina, se pelean para nada.
Sul ponte sventola bandiera bianca,
sul ponte sventola bandiera bianca.
sábado, 16 de febrero de 2008
La izquierda italiana elige el suicidio

domingo, 16 de diciembre de 2007
Avanti la sinistra!

Vengo de la Italia Roja, donde los únicos que pegan carteles en la calle son Berlusconi y los zopencos de Alleanza Nazionale; la izquierda allí no necesita ni hacer campaña electoral, barre con la gorra con porcentajes de escándalo. Es el rico, culto, avanzado e izquierdista Centro-Norte italiano, las regiones que van de Toscana a Umbría.
Pronto habrá movida política en la escena política italiana, pues buena parte de la izquierda se está reagrupando frente a ése desnatado Partito Democratico que impulsan algunos (cada vez menos) ex comunistas. La onda de la nueva formación estará, para entendernos, en la estela de Oskar Lafontaine y de la coalición Respect británica. Bandiera rossa i avanti!.
Por cierto, las calles de Bolonia (la capital de Emilia Romagna) están adornadas por aquí y por allá con una simpática caricatura de Zapatero reproducida a spray sobre una plantilla, sin que figure nombre, ni siglas ni lemas, ni nada de nada: sólo la efigie de Zapatero, inconfundible con su ceja levantada. Curioso.
miércoles, 28 de febrero de 2007
El santo torturador

Ocurrió que mientras Pinelli era hábilmente interrogado en la oficina del comisario Calabresi, el detenido falleció al ser arrojado por la ventana bien fuera por el propio Calabresi o por uno de sus hombres. Además el cuerpo presentaba señales de haber sido salvajemente torturado. Primero se dijo que el anarquista se había suicidado lanzándose por la ventana, pero ante el tremendo escándalo público y la presión social sobre los responsables no hubo más remedio que organizar una parodia de juicio, en la que un juez venal sentenció que el anarquista cayó por la ventana a consecuencia de un desmayo que le sobrevino durante el interrogatorio.
El caso adquirió dimensión internacional cuando en 1970 el dramaturgo Darío Fo estrenó su obra "Muerte accidental de un anarquista", una farsa demoledora que señalaba públicamente a todos los implicados en el apaño de intentar ocultar aquél asesinato. Por supuesto el principal perjudicado por la denuncia de Fo era el comisario Calabresi, que pasó a convertirse para la izquierda y los demócratas en general en el icono mismo del policía torturador y alineado con el fascismo rampante. En 1972 Calabresi fue asesinado a tiros por miembros de Lotta Continua, uno de los grupos de extrema izquierda más activos durante los llamados Años de Plomo, ya comenzados los setenta, cuando los tiroteos y los bombazos se hicieron parte del paisaje cotidiano de la vida política italiana.
Al parecer Calabresi era un católico fervoroso, que antes de ser policía había querido ser sacerdote. Policía, católico y asesinado por "rojos" era y es una combinación atractiva ante ciertos sectores de la sociedad. A mediados de los años noventa un cura, un tal Innocenti, empezó a promover la causa de su beatificación. Es ahora sin embargo cuando tal iniciativa ha recibido todas las bendiciones vaticanas requeridas, al haber obtenido el "nihil obstat" concedido por el cardenal Camillo Ruini, presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, que además ha designado a Innocenti como postulador oficial de la causa. O sea que la cosa va en serio. Por cierto, la viuda de Luigi Calabresi, Gemma Capra, declaró sentirse "estupefacta" al saber que se había abierto una causa de beatificación a favor de su difunto esposo.
La cuestión es que ahora el postulador ha de probar que Calabresi murió como mártir de la fé cristiana. También que mediante su "intercesión" se ha producido al menos un milagro.