lunes, 10 de octubre de 2011
Nicaragua, la revolución traicionada
sábado, 24 de septiembre de 2011
Criollismo y esquizofrenia. Una reflexión sobre las pseudoindependencias americanas
martes, 2 de noviembre de 2010
En Brasil sí se está transformando la realidad social

viernes, 29 de octubre de 2010
Néstor Kirchner y el fin del peronismo

sábado, 9 de octubre de 2010
Un fragmento de "La ciudad y los perros"

Fragmento de La ciudad y los perros (pág. 14), la obra cumbre de Mario Vargas Llosa.
Para que luego alguien diga que la cultura es cara...
viernes, 8 de octubre de 2010
Mario Vargas Llosa, del compromiso social al premio Nobel

- Zavalita ¿cuándo se jodió el Perú?.
- El Perú nació jodido, amigo mío.
La fotografía que ilustra el post corresponde a los años en que Mario Vargas Llosa era joven, izquierdista, "feliz e indocumentado" (como escribió de sí mismo García Márquez evocando los años sesenta y su estancia en Barcelona).
lunes, 27 de septiembre de 2010
Venezuela empieza a librarse del chavismo

domingo, 23 de mayo de 2010
Argentina, doscientos años de golpes de Estado militares

miércoles, 21 de abril de 2010
Evo Morales, el científico

En la fotografía que ilustra el post aparece lo que al decir del señor Evo Morales es una fábrica de homosexuales bolivianos: un establecimiento de comida rápida especializado en carne de pollo, sito en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.
miércoles, 27 de enero de 2010
General de división dorado al horno sobre lecho de verduritas, una receta de Gabo

martes, 24 de junio de 2008
Cuidado con las ONG's

Las fotografías tomadas durante aquella especie de Encuentro en la Tercera Fase saltaron a la mayoría de medios de comunicación del mundo. Funai se aseguró un buen puñado de portadas y también los elogios generales, al pedir inmediatamente que se dejara en paz a aquellos indígenas para que siguieran viviendo a su modo y sin ser contaminados por el hombre blanco.
Ahora resulta que según publica el periódico The Guardian, todo fue un montaje de Funai, y que esa aldea india y sus habitantes son conocidos y están controlados nada menos que desde 1910. "Se trata de pueblos que no quieren relacionarse con nosotros", explicó el director del Funai, José Carlos dos Reis Meirelles cuando se produjo el supuesto "descubrimiento". Ahora el propio Meirelles ha confesado a The Guardian que esta tribu se conocía desde hace un siglo.
El propio Meirelles ha explicado al diario británico que su misión en la zona -una parte del estado brasileño de Acre- tenía el objetivo de "probar la falta de contacto de algunos grupos humanos de la selva amazónica con la civilización y cómo afecta el avance de la industrialización a la tala ilegal en el Amazonas". A primera vista la causa de Meirelles y de Funai parece impecable, pues. Las dudas comienzan cuando uno se pregunta por qué si su causa es tan limpia y convincente por sí misma, recurren a las mentiras como ése reportaje y la información tramposa que Funai ofreció a partir de él. Por qué Funai, en suma, trató de manipular a la opinión pública.
La razón es muy simple: Funai, como muchas otras organizaciones de ésa clase, públicas o privadas, maneja ingentes cantidades de dinero ajeno que supuestamente administran en beneficio de las más nobles causas. La experiencia dice que desgraciadamente en muchos casos no es así, y que el vil metal acaba imponiendo sus egoístas razones sobre otras consideraciones, y que a menudo, tras la pantalla del sentimentalismo humanitarista suele ocultarse el lucro particular y la evasión de impuestos de unos vividores y de las empresas con las que suelen estar conectados.
lunes, 9 de junio de 2008
El criollismo, ideología explotadora de América

sábado, 24 de mayo de 2008
El fracaso de ALBA

Sin embargo, el fracaso cosechado por la iniciativa es más que notable. Descontada
Fuera de ALBA quedarán no sólo
ALBA no es ninguna alternativa pues, y menos al ALCA neoliberal lanzado por los norteamericanos con idénticas intenciones que las de los chavistas: imponer su hegemonía económica en el subcontinente. En suma, tanto ALCA como ALBA son instrumentos de dominación al servicio de dos proyectos burgueses hegemonistas y por ahora enfrentados: el sostenido por el imperialismo norteamericano y el sostenido por el imperialismo "bolivarista".
Frente a ellos, cabe una tercera posibilidad: que sean los propios países latinoamericanos quienes construyan un espacio de cooperación económica y política solidaria en pie de igualdad. La construcción de ese espacio comienza a urgir ya en Latinoamérica. El nacimiento de UNASUR, una comunidad de 12 países latinoamericanos impulsada por el Brasil de Lula, puede apuntar en esa dirección o ser el enésimo intento fallido, pero señala que algo se mueve en América Latina al margen de Washington y Caracas.
jueves, 15 de mayo de 2008
Karl Marx escribe sobre Simón Bolívar

En una carta a Engels fechada el 14 de febrero de 1858, Marx escribe que Dana le ha reprochado que el artículo "estaría escrito en un tono prejuiciado y exige mis fuentes. Estas se las puedo proporcionar, naturalmente, aunque la exigencia es extraña. En lo que toca al estilo prejuiciado, ciertamente me he salido algo del tono enciclopédico. Hubiera sido pasarse de la raya querer presentar como Napoleón I al canalla más cobarde, brutal y miserable. Bolívar es el verdadero Soulouque". El tal Soulouque fue un ex esclavo que se proclamó Emperador de Haití, ejerciendo el poder mientras le duró de un modo enloquecido, despótico y cruel.
martes, 4 de diciembre de 2007
El declive del chavismo

domingo, 11 de noviembre de 2007
De aquellos polvos, estos nervios

La falta de propuestas serias, articuladas y eficaces frente a la pobreza endémica, la explotación económica y las profundas barreras entre clases sociales en la mayoría de los países americanos, ha terminado por dejar campo abierto a toda clase de mesianismos, caudillismos y populismos que se ofrecen a sí mismos como faros de una supuesta revolución que no acaba de llegar, porque quienes encabezan esos movimientos y quienes desde atrás les sostienen y se benefician de ellos no tienen el menor interés en que llegue. La izquierda americana –cada día más débil, fragmentada e impotente- se agarra a los calzones del primero que pasa prometiendo a voces un mañana de justicia social; si además el mesías de turno es capaz de lanzar de vez en cuando algún desplante a los EEUU o a esos “ricos europeos” supuestamente causa de todos los males de América, mejor que mejor.
Es así como Chávez, un producto arquetípico de los cuarteles iberoamericanos –un individuo ignorante, resentido, simplista, autoritario y sobre todas las cosas, extremadamente ambicioso-, ha llegado al poder montado sobre la ola de un pueblo que ya no aguantaba más. Con todo, imaginar que Chávez, cual nuevo Bolívar Rojo, llevará la revolución social a todos y cada uno de los rincones primero de Venezuela y luego de América entera, es tan delirante como sostener que los oficiales de la Escuela de Mecánica de la Armada argentina preparaban desde sus subterráneos la democratización de todo el continente.
Pero en tanto llega el momento de la verdad en que el chavismo acabe de manifestarse en todo su esplendor como lo que es, el dinero fácil del petróleo le seguirá sirviendo para cultivar una imagen de benefactor de los pobres propios y ajenos, y para que algunos gobiernos americanos le bailen el agua, probablemente más por necesidad que por cariño.
Sin embargo, las cosas ya no van tan bien para Chávez como hasta hace poco, y el catálogo de problemas empieza a ser inquietante para él. Sus pistoleros y antidisturbios llevan días enfrentándose en la Universidad de Caracas con estudiantes contrarios a la reforma de una Constitución que el propio Chávez diseñó en su día, reforma con la que pretende perpetuarse en el poder, precisamente ahora que empieza a ser abandonado por quienes le crearon como figura pública. El barril de petróleo, además, acaba de superar la barrera psicológica de los 100 dólares, así que es de prever una contracción de la demanda, que a medio plazo podría llegar a cegar la fuente del maná supuestamente inagotable en la que se asienta el chavismo, los petrodólares. Por otra parte, las iniciativas internacionales de Chávez no acaban de cuajar: su candidato fracasó en Perú, el ecuatoriano Correa cada día le es más esquivo mientras se acerca a Europa (500.000 ecuatorianos residen y trabajan en España), Evo Morales le sigue la corriente sin entregársele del todo, y sólo el desprestigiado, corrompido y trasnochado Daniel Ortega se engancha a sus propuestas con el entusiasmo de quien necesita desesperadamente que alguien apuntale como sea la economía de su país. Los cubanos sufren a Chávez resignadamente, y le aguantarán mientras siga casi regalándoles el petróleo que necesitan pero ni un día más.
Es así que Chávez ha llegado a Santiago de Chile nervioso. Como Macbeth, desde las almenas de su castillo empieza a vislumbrar los ejércitos de enemigos que suben a por él; es sólo una imagen, por ahora. Aunque sus problemas no son sólo de orden político strictu senso.
Antes de viajar a Santiago, Chávez sabía que Zapatero iba a poner sobre la mesa tres propuestas que van a dañar esa imagen de Papá Noel de los pobres que el caudillo venezolano se ha construido en estos últimos años a fuerza de petrodólares: la creación de un centro internacional de prevención de desastres en Panamá que operará para toda América Central y Caribe, convenios con Ecuador y Perú que permitirán que las cotizaciones a la Seguridad Social de los inmigrantes en España reviertan en los países de origen, y la tercera y quizá la más importante a largo plazo aunque ahora sea casi sólo un gesto simbólico inicial, la creación de un Fondo para el Agua en América, que España contribuirá a poner en marcha aportando 1.500 millones de dólares.
No es de extrañar por tanto que Chávez usara la provocación para reventar las conclusiones de la Cumbre de Santiago. El recurso fácil de tildar de fascista a Aznar, logró su efecto: que la delegación española se sintiera insultada no por quien es y lo que representa Aznar (ahí no hay discusión alguna posible), sino porque escupiendo sobre él en mitad de la Cumbre se ninguneaba las únicas aportaciones serias hechas allí. Es obvio que en un encuentro institucional, la delegación española no podía aceptar que se la humillara simplemente para que el ego de Hugo Chávez quedara a salvo.
La grosería y zafiedad de Chávez interrumpiendo a Zapatero cuando éste, en el uso de la palabra y con tono comedido, le estaba pidiendo suavemente un comportamiento más acorde con su supuesta condición de estadista internacional, tuvo una respuesta sorprendente de parte del rey Juan Carlos, que constituye un regalo inesperado para el caudillo venezolano. Nunca debió abrir la boca Juan Carlos en ese incidente, y menos en el tono en el que lo hizo.
Gracias al rey de España pues, Chávez en vez de salir derrotado y con el rabo entre las piernas va a poder presentarse ahora como un mártir del neoimperialismo español, y evitar sobre todo que se hable de los acuerdos de esta Cumbre. Así se las ponían a Fernando VII, dicen.
Es obvio que Juan Carlos al igual que Chávez, también anda con los nervios alterados, aunque curiosamente su nerviosismo proceda más del maltrato que está recibiendo desde los medios de comunicación y los sectores políticos afines a Aznar, que del auge continuo de la opinión republicana en España. Lo segundo no le viene de nuevo: éste es un país republicano de antiguo, otra cosa es que por diversas circunstancias esa opinión ampliamente mayoritaria haya estado en letargo durante algunos años. En cuanto a la enemiga que le profesa el aznarismo y cuanto ese sector de la sociedad española representa en el orden político, económico y social, seguramente sí le toma más desprevenido, aunque no debería por qué.
Y es que el fascismo en España, de José Antonio a Aznar, siempre ha sido republicano.