Un excelente suelto de Almudena Grandes en la última página de El País de hoy, dibuja con precisión el clima siniestro que vive la noche (y buena parte del día) de un Madrid que ha perdido la alegría de hace apenas un par de décadas atrás, para convertirse en una ciudad en la que a pesar de mandar "la gente de orden", o tal vez precisamente por eso, se vive un remedo de capital latinoamericana con funcionarios corruptos, bandas de narcotraficantes y mafias que dan "protección" a locales nocturnos, todos juntos y revueltos y alimentándose criminalmente unos a otros.
Viene a decir Almudena que en aquel Madrid de los tiempos de Tierno Galván y Barranco, la delincuencia era un producto además de escaso, muy poco letal dado su carácter casi artesanal. Hoy día sin embargo, entre los nuevos delincuentes que acampan en la noche madrileña menudean las pistolas automáticas y el armamento sofisticado, los ajustes de cuentas con muertos encima de la acera o en medio de la pista de baile, y los choques entre grupos perfectamente organizados y en continua pugna por el control de un negocio de muchos millones de euros.
Por encima de esos victimarios y de los cómplices de su nivel, hay un mundo de tipos elegantemente vestidos y bien instalados en los peldaños honorables de la sociedad española actual. Dice la escritora que "Ahora, los que me dan miedo son ellos, los representantes nocturnos de la autoridad, porteros, guardaespaldas, policías, y ciertos clientes que dejan sus deportivos abiertos en doble fila. La gente de orden por fin ha conseguido que todos volvamos a ser sospechosos". Tal vez se trata precisamente de eso, de que todos seamos sospechosos para que ellos puedan seguir tranquilamente con sus "business".
En resumidas cuentas la gente de orden, como dice Almudena Grandes, ha reconquistado la noche de Madrid, y todo lo demás viene por añadidura.
2 comentarios:
Al respecto de lo que cuentas y dices que cuenta Almudena Grandes, vi un reportaje el viernes por la noche en TVE 1 que me quedé estupefacto. En "Comando Actualidad" se trató este tema de las mafias y la noche. El primero que salió fue el presidente de España 2000, dio toda una lección sobre el armamento que se utiliza en esos bajos o altos fondos, según se mire. Y lo que me hizo más gracia, tiene chófer particular y es ruso. No entiendo mucho de mafias, pero ser presidente de un partido fascista que quiere ver limpia a la grande España de toda la escoria, inmigrantes incluidos,y tener un chófer inmigrante es para mondarse de risa... o de miedo según cada cual.
Juan, el inmigrante ése no es precisamente de los que vienen a poner ladrillos. Esos tipos suelen ser antiguos militares o policías, algo muy corriente entre la mayoría de los pistoleros mafiosos del Este de Europa.
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