lunes, 10 de diciembre de 2007

Karl Marx, mucho más que un filósofo


Suele decirse que Marx es "un filósofo alemán", y creo que fue Kropotkin quien afinó un poco más, llamándole "patriota alemán" (en pago, Marx le llamó a él "aristócrata ruso"; pienso que los dos tenían razón). Seguro que Marx fue filósofo y fue alemán, ambas cosas hasta los tuétanos, pero también fue muchas cosas más y algunas de ellas siguen teniendo vigencia hoy día.

Cierto que los fundamentos del marxismo son filosóficos, pero la originalidad de la aportación de Marx radica en que no se detiene en la especulación filosófica y rápidamente dá el salto al análisis social y económico, e inevitablemente, a la política. Su legado trasciende con mucho el de sus pares filósofos contemporáneos, entre otras cosas porque Marx hace aterrizar la filosofía en el conocimiento del mundo real y prosaico y permite vislumbrar desde él un horizonte por el que luchar.

Por lo demás, la teorización marxista acaba con Marx. Lo que viene después de él son, en el mejor de los casos, interpretaciones interesadas del corpus marxiano original; en el peor, pura prostitución de las ideas de Marx por individuos y regímenes políticos criminales.

Extender el marxismo hasta las "aportaciones" de los Lenin, Stalin, Mao o el Camarada Arenas, es un abuso semejante a considerar a Rouco Varela coautor del cristianismo en pie de igualdad con Jesús de Nazareth.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Saludos de http://www.social-martinhem.blogspot.com, muy bueno tu blog.

Joaquim dijo...

Gracias, Martinhem.