Se anuncian casi 6.000 enmiendas a la ponencia política que se presentará en el próximo Congreso del PSOE. Habría que ver si la calidad viene pareja con la cantidad.
En realidad, visto lo visto, a la ponencia política del PSOE se le pueden poner muchas enmiendas. La primera, una que liquide de una vez esa confusión conceptual entre políticas de extensión de derechos y políticas sociales; nada que ver, a pesar de que ministros, ministras, “menistrillas” y dirigentes socialistas de todo pelaje las confundan (e intenten confundirnos) con toda soltura.
Que los homosexuales se puedan casar o que el papá de un recién nacido pueda disfrutar de unos días de permiso a cuenta de su roro, está muy bien. Pero eso, de políticas sociales -es decir, de políticas transformadoras en un sentido socialista de la realidad social y económica-, tienen lo que la Iglesia católica española de defensora de las libertades públicas: absolutamente nada.
En ese sentido, reivindicar políticas sociales que defiendan y mejoren los servicios públicos, que prioricen la atención a los más débiles y necesitados, que mejoren la calidad de vida de todos los españoles, y que en definitiva, contribuyan a repartir la riqueza que crean los trabajadores asalariados pero de la cual se apropian en exclusiva unos cuantos empresarios y rentistas, serían unas bellas enmiendas.
Hablar de todo eso es hablar de justicia social. Nada que ver con las preocupaciones del socialismo fashion actual; sus intereses van por otros derroteros.
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8 comentarios:
Quizás habría que anotar, también, algúna propuesta de progresividad en el impuesto de las empresas. Porque, yo al menos, no entiendo un tipo único tanto para una pequeña empresa, con dificultades todos los dias y que es la que crea empleo y riqueza, como para los intermediarios financieros y otros especuladores que no crean nada, chantajean a los gobiernos y esconden parte de los beneficios con mil subterfugios de ingeniería financiera.
Curiosamente, la tendencia universal parece ser, por contra, disminuir los impuestos a los más ricos y aumentar la presión fiscal sobre el trabajo asalariado y el pequeño empresario.
A tal "política" le llaman "liberalización fiscal", y según las lumbreras de la cosa "crea mucho empleo"... seguramente en los paraísos fiscales donde termina todo ése dinero que los españoles más pudientes defraudan.
¿Y por que será?. Ni sindicatos, ni partidos de izquierda, ni ONGs, ni intelectuales denuncian y combaten esto.
Podría ser que piensen en que como no son capaces de gastar todo lo que ganan quizás lo inviertan y generen riqueza, pero esto que sería dudoso para los de la economía productiva es obviamente incierto para los de la especulativa que lo unico que hacen es especular e invertir en empresas consolidadas y sobre todo depredadoras..
Tal vez porque todo el mundo cree firmemente esa mentira de que cuanto mejores sean los números de la macroeconomía, más felices somos todos los ciudadanos.
Es aquello del pollo que te comes tú y yo ninguno, pero como los dos somos ciudadanos del mismo país resulta que en estadística macroeconómica nos comemos medio pollo cada uno. Aunque yo me haya quedado in albis...
En ese escenario, la microeconomía carece de importancia, obviamente. Es hasta inelegante hablar de conceptos como "renta familiar" o "inversión pública en bienestar social" para medir el verdadero grado de desarrollo de una sociedad, tal como propone Vicenç Navarro.
De acuerdo contigo, como siempre.
Roguemos para que del congreso salgan socialistas de verdad y no esta cosa que no se sabe que es y llaman PSOE.
Amén, Marian.
La verdad que también estoy a la espectativa de lo que pueda salir del congreso del partido.
Y la verdad que con esto de la crisis económica y la renovación del PP, este ya no va a ser un congreso de aplausos. Tendrán que decidir como hacer frente a la estrategia del PP: no fomentar el voto anti PP y dejar que el PSOE se enfrente a su base electoral, si finalmente pacta los próximos presuspuestos con CiU.
La abstención por la izquierda de votantes socialistas y la crisis de IU son las bazas del PP, junto a un acercamiento a las derechas nacionalistas.
Apertas dende Galicia.
En principio parece que el Congreso se ha planteado como un escaparate de lo bien que va todo con Zapatero de líder.
Sin embargo, parece que algunas enmiendas salidas de las bases han inquietado un tanto a los organizadores, y tendrán que hacer un cierto esfuerzo para contener y reconducir las críticas. Para conseguirlo, se van a colocar al frente de los debates de las ponencias a figuras del partido con cierta capacidad de maniobra.
Veremos si finalmente, algunos petardos no le acaban estallando en las narices a las figuritas del Belén.
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