miércoles, 26 de noviembre de 2008

En otoño florecen los curas fascistas


Dice el diario electrónico El Plural que "numerosos vídeos ilustran la existencia de curas fascistas en el seno de la Iglesia católica (española)". La información la firma José María Garrido, y se acompaña efectivamente con varios vídeos, cuyas imágenes ponen los pelos de punta.

Según cuenta Garrido, parece que uno de los santuarios de éste fascismo clerical es el pueblo de Belchite, en Zaragoza, famoso por la batalla que se libró allí durante la guerra de España. Recientemente se celebró en esa localidad una concentración de Acción Juvenil Española (AJE), un grupo de extrema derecha, ante el cual un tal padre Amable hizo un encendido discurso de carácter fascista.

Otro pájaro de similar pelaje es el padre Manuel Martínez Cano, perteneciente a los Misioneros de Cristo Rey, quien "en presencia de varios dirigentes de ultraderecha" y con la excusa de celebrar la festividad de Cristo Rey, largó un discurso en Castellón en el que llamaba a su audiencia a resistir a aquellos que "quieren destruir la obra de la Iglesia. Y en fin, un tercer cura, el padre dominicio Francisco Pérez Arcos, ofició misa en un acto de homenaje a los llamados "mártires de Aravaca", también este mismo mes de noviembre. "Al final del acto religioso", dice la información de El Plural, "los asistentes cantaron el Cara al Sol a la par que realizaban el saludo fascista".

En este reverdecimiento de la alianza entre Iglesia y fascismo en España, no podia faltar en estas fechas situadas en torno al aniversario de la muerte del dictador Franco un acto en Paracuellos del Jarama. Escribe Garrido que en el de este año, al acabar la inevitable misa, "el Presidente de la Hermandad y el párroco emérito del municipio madrileño de Loeches depositaron una corona de laurel ante el monolito que se yergue en medio del camposanto, mientras sonaba La muerte no es el final. Después, el público entonó espontáneamente el Cara al sol".

Este "destape" no se produce obviamente porque sí. Desde la jerarquía eclesiástica se viene espoleando el enfrentamiento directo de la abundante clerigalla ultraderechista con el gobierno y en cierto modo, con toda la sociedad española, en la medida en que los valores que ésta ha hecho suyos en los últimos años resultan incompatibles con la preponderancia ideológica y los privilegios materiales de que goza la Iglesia católica en este país desde tiempos inmemoriales, ampliados además hasta el paroxismo durante la dictadura franquista.

Para ellos son tiempos de crisis, y no sólo material. En respuesta, la jerarquía eclesiástica, acostumbrada a defender su próspero negocio con uñas y dientes, parece estar lanzando ahora un órdago a la grande a un Gobierno que si de algo peca es precisamente de pacato y sumiso en sus relaciones con esta verdadera Mafia Negra, auténtica peste de España desde hace más de un milenio. Los curas están en pie de guerra, y como en tiempos de las guerras carlistas, bajo sus sotanas asoman de nuevo los trabucos con los que nos amenazan a todos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me rechina el que se les llame "padres" a esta gentuza.

La iglesia viendo que cada vez habia menos ingenuos, llamados creyentes, y por miedo a que su negocio se fuera a pique, es por lo que desde el púlpito y su radio han hecho y siguen haciendo todo lo posible por dividir a los españoles.
Les encantaria otra guerra civil si con ello volvieran a tener los privilegios que tenian con Franco.
Nunca les ha importado que haya violencia y asesinatos ya que ellos los han practicado siempre que han podido.

Me producen verdadero asco.

Lo que mas reprocho a este gobierno es que sigan dándoles tantos privilegios, así nunca acabaremos con esta mafia repugnante e hipócrita que juega con otra vida para vivir como "curas" en ésta.

Marian

Joaquim dijo...

De hecho, la Iglesia católica española ha estado siempre detrás del "brazo secular" represor, bendiciendo y legitimando sus acciones. En pocos países, al menos de Europa, han actuado durante tanto tiempo de una manera tan odiosa como agentes del aborregamiento colectivo al servicio de los poderosos.

No cabe duda de que si Dios existiera gentes como Rouco, Cañizares y el resto de la banda lo iban a pasar muy mal en una hipotética otra vida plena de justicia y bondad. El sitio de estos curas de Satanás es el Infierno, al que Dante condenara a sus pares italianos medievales en "La Divina Comedia".

Anónimo dijo...

Para comparar podéis leer el artículo de hoy en el diario Público sobre las denuncias de un sacerdote italiano de connivencia del Vaticano con la mafia. La Iglesia Católica no solo tiene historial en España. De todas maneras siempre tienen la excusa de que la Iglesia está compuesta por hombres (en el sentido literal, la jerarquía) y como tal, es pecadora.