lunes, 4 de abril de 2011

Esperando a los bárbaros. Después de Zapatero, el PSOE



Zapatero ha dicho adiós, sea enhorabuena. En realidad no se ha ido del todo ya que se queda como presidente del Gobierno hasta las próximas elecciones generales, y como secretario general del PSOE hasta que se acuerden de que sigue en esa silla y le hagan levantarse. Aún tardarán unos meses.

Porque en definitiva Zapatero no se va por voluntad propia. Si alguien cree que por fin este hombre se ha dado cuenta de la distancia sideral que existe entre quien él cree ser y quien realmente es, está muy equivocado. Han sido las circunstancias (la crisis económica, el desmadre en el partido, la caída en picado de su credibilidad, el descubrimiento público de sus limitaciones...) y desde luego eso que los futboleros llaman "el entorno" (personal, político, mediático) quienes finalmente le han convencido/obligado a tirar la toalla.

De todos modos no merece la pena perder el tiempo rememorando un ser tan anodino, que además por suerte ya es agua pasada. Nos queda como legado su "optimismo bobalicón", según lo calificaba ayer Josep Ramoneda en El País, y la certeza de que cualquier mindundi puede llegar a lo más alto simplemente con estar en el sitio oportuno en el momento oportuno, habilidad en la que Zapatero ha mostrado, ahí sí, una maestría rayana en la genialidad a lo largo de toda su carrera política.

Hecho el gori-gori con el que el clero despide a los difuntos, vayamos a la médula del asunto. ¿Y ahora qué? Pues ahora las primarias, según la sana costumbre del PSOE muy anterior a que los yanquis la pusieran de moda. Apuntan dos candidatos: uno serio, solvente, con capacidad y experiencia, socialdemócrata aunque tibio, de ambiciones templadas por una idea de servicio colectivo que ha guiado su trayectoria durante décadas; la otra, una destacada representante de la efebocracia zapateril (aunque ya ha cumplido los 40 años), indocumentada, recién llegada como quien dice, sin bagaje personal ni político pero con descaro y ambición inversamente proporcionales a sus carencias, y desde luego ayuna de cualquier asomo de ideología o cosa que se le parezca. Esto es lo que hay, ni más ni menos. La gente corriente, que no se chupa el dedo, ya ha empezado a manifestarse: Pérez Rubalcaba no solo barrerá a Chacón en las primarias del PSOE, sino que cada día que pase irán creciendo sus posibilidades de derrotar a Rajoy y humillar de nuevo al Partido Popular en las próximas elecciones generales.

De modo que a lo mejor los bárbaros se quedan con las ganas de conquistar La Moncloa (estos bárbaros "españoles" me refiero, que los bárbaros catalanes ya se han instalado en un lado del antiguo Foro romano de Barcelona, en la Generalitat, y ahora quieren también mancillar el otro lado de la plaza, el Ayuntamiento). Si las municipales dan un resultado más apretado del que muchos esperan, las generales podrían anticiparse al otoño. Claro que si se da alguna recuperación económica por leve que sea y ETA toma el camino del final, la legislatura se podría estirar hasta primeros de año, para darle tiempo a Rubalcaba a rentabilizar éxitos y extender un mensaje de "optimismo serio" entre los por ahora desmotivados votantes de la izquierda.

En todo caso será el partido quien tome las riendas de sí mismo en los próximos meses, una vez que el último César ha sido virtualmente sacado de ese trono que siempre le vino grande y que va a seguir ocupando unos meses más porque así lo requiere la inercia del poder. Y es que para un partido con 130 años de historia, que ha sido capaz de aguantar lo que ha tenido que aguantar desde dentro y desde fuera el PSOE a lo largo de su existencia, José Luis Rodríguez Zapatero representa apenas un leve accidente, un breve paréntesis que será pronto cerrado y enseguida olvidado.

En la imagen, Alfredo Pérez Rubalcaba y Carmen Chacón se ignoran en el transcurso del último Comité Federal del PSOE.

12 comentarios:

Celemin dijo...

A mi no me pilláis en otra, ni aunque fueras tu el candidato (bueno, si fueras tu podría hasta pensármelo)

Salud y socialismo frente al socioliberalismo

Anónimo dijo...

Que duro es Ud. Joaquim. Supongo que tendrá elementos de juicio probado y no serán intuiciones o percepciones.
Al margen de eso, me gustaría saber que opina de lo que le plantearé, y vaya por delante que a mí Rubalcaba me da muy buenas vibraciones.
Es más que probable que el PP gane las próximas elecciones generales, si sale elegido Rubalcaba, será un magnífico lider de la oposición (menguada oposición), pero estará esa legislatura y en la próxima habrá otro candidato - este país no vota a personas mayores, y le recuerdo que los hombres y no sólo las mujeres cumplen años-; sin embargo si sale elegida Chacón, estará fogueándose y dándose a conocer para las siguientes elecciones.
La cuestión está entre un candidato para el momento o un candidato con proyección de futuro.

Disculpe que le llame la atención sobre ciertos aspectos que toca, pero son algo ofensivos.

Un saludo.
R.E.G.S.

Joaquim dijo...

Querido Celemín, si yo fuera candidato con posibilidades significaría que todos los demás estarían corriendo rumbo a Francia porque habría pasado o estaría a punto de pasar algo muy gordo. Así que no nos conviene a nadie.

Bromas aparte, en realidad ya me lo ofrecieron una vez, cuando un servidor era tan joven que casi da ternura recordarlo. El precio era carísimo: cerrar la boca y hablar con el culo. Antes de que saques conclusiones precipitadas, te recordaré que en aquellos tiempos anteriores a la electrónica parlamentaria los electos se ponían de pie en los escaños para manifestar si votaban a favor o en contra de lo que fuere.

Joaquim dijo...

Estimado R.E.G.S., lamento que pertenezca usted a esa parte de la ciudadanía que parafraseando a los hermanos Cohen consideran que éste no es que no sea país para viejos, es que no lo es para nadie que no sea casi un adolescente/a calcetinero/a, o que al menos finja serlo aunque ya haya cumplido los 40 tacos.

La especie de que, sí, bueno, Rubalcaba puede hacer el "trabajo sucio" de machacar a un presunto presidente Rajoy durante una legislatura y luego cederle galantemente la cabeza de cartel a la Princesa del Pueblo Bis, dado que el tal Rubalcaba es ya un "viejo" a jubilar lo antes posible, no solo es interesada de parte efebócrata y favorece abiertamente a la (extrema)derecha española, sino que revela hasta dónde hemos llegado en esto de la efebocracia y el culto a la juventud.

Entre las idioteces más supinas que ha perpetrado Zapatero, una de las mayores ha sido jubilar de TVE y de RNE a todos los profesionales mayores de 50 años: gente de valía, con experiencia de años y en su mayoría de izquierdas...¡cuantos profesionales de talento fueron abruptamente substituidos de una tacada por niñatos/as indocumentados que gesticulan como monos en la pantalla según el modelo de corresponsal popularizado por las teles yankis, mientras balbucean datos sobre los que es evidente que no tienen la menor referencia cultural previa!.

Hombre por Dios, que Rubalcaba cumplirá 60 años en julio...

Anónimo dijo...

Se equivoca Joaquim, no soy yo la que defenestro a nadie por la edad, me parece dentro de las variables a considerar para ser candidato o presidente, la más irrelevante. Pero en las dos vertientes, ni por pasar de los 50 pero tampoco por no llegar a los 40. Madina, por ejemplo, es muy joven, sin embargo, un político preparado.
Hablo de la sociedad española en general.
Y si hablamos de futuro, hay que sumar a los que tiene 4 años.


R.E.G.S.

Celemin dijo...

Pue si es así, a lo mejor hasta nos interesa que fueras el candidato, de hecho a mi ya me has ganado.

Y en cuanto a lo de Rubalcaba, un partido coherente, votaría a Rubalcaba sabiendo que este acabará su carrera en la oposición y cedería el timón en el siguiente congreso a alguien suficientemente desconocido que pueda hacer olvidar, de nuevo, las políticas neoliberales de ZP. Eso en un partido con coherencia. En el actuaal P$%€, Rubalcaba y Chacon (Policías contra Guardias Civiles) acabarán a gorrazos, ganará Rubalcaba que perderá y acabarán los dos en la cuneta política.

Salud,

Joaquim dijo...

Ya puestos a hablar de futuro porqué limitarnos: sumemos a los que no han nacido.

En fin, que la explicación de muchas de las cosas que están pasando radica precismente en que en la política ya no se valora la experiencia y la veteranía. La presunta preparación de los jóvenes aspirantes debería pasar por algo más que unos cursillos calcados del márqueting norteamericano de fabricación de cuadros y dirigentes clónicos. En cuanto a Madina le veo cada día más profesionalizado, en el peor sentido del término. Una lástima.

Celemín, esa formulación que haces parece un "mix" parido al alimón por Cayo Lara y la señora Chacón :) Creo que ahí no has dado ni una!
Tiempo al tiempo.

Celemin dijo...

Ya veremos...

Anónimo dijo...

Me ha hecho reír, lo que hace una coma.
Aunque quisiera que la experiencia y la veteranía no sea lo más valorado, en ese caso a Fraga no le gana nadie; preferiría que las características más válidas sean unas ideas claras, coraje para llevarlas a cabo, honestidad y vocación de servicio público (servir a la sociedad, no servirse a sí mismos de lo público, se entiende).

R.E.G.S.

Joaquim dijo...

Hablaba de experiencia y veteranía en términos democráticos. Fraga obviamente está fuera de eso.

Por cierto, ayer volvió a aparecerse el fantasma del GAL, con un juicio relativo a hechos supuestamente sucedidos en 1986. Y mientras tanto Fraga Iribarne o Utrera Molina, tan panchos. Olé España y la Transición.

Anónimo dijo...

Las cosas como son. Pobre PSOE si, después del parétesis de Zapatero, tiene que volver a recurrir a uno de la vieja guardia como cabeza de cartel. Para eso, que vuelva Felipe.
Se que es un argumento de la derecha extrema, pero es verdad.
Por cierto, ya lo dije hace tiempo en otro comentario ( cuando no era S. de organización ): ojo con Marcelino Iglesias

Joaquim dijo...

"Anónimo", después del descacharrante fiasco de Gran Scala, Marcelino Iglesias está de retirada de la política. Se jugó todo su prestigio -que hace dos o tres años ya no era mucho, por cierto- a la carta de un presunto macroproyecto del que hasta los niños de teta sabían desde el principio que era un bluff montado por estafadores internacionales de medio pelo.

Su actual cargo orgánico en el partido es en su caso un colchón para dulcificar su salida de la vida política. Me juego contigo una botella de Somontano a que después del próximo Congreso del PSOE, Marcelino ni siquiera será vocal de la Ejecutiva. Un saludo.