jueves, 2 de septiembre de 2010

Partido Popular valenciano: todos a la cárcel


Acabo de leer la reproducción en PDF del informe elaborado por la Brigada de Blanqueo de Capitales, que como su nombre indica es un organismo de la policía que se dedica a poner a disposición judicial a granujas que han hecho del desfalco, la estafa, el impago de impuestos y la evasión de capitales una religión que practican con fanatismo. El informe documenta con precisión implacable las simbióticas y nada presuntas relaciones entre el Partido Popular (PP) y el Grupo Parlamentario Popular de la Comunidad Valenciana con las empresas de Correa implicadas en la trama Gürtel.

La pieza en cuestión tiene 30 apretadas páginas, y su lectura pone los pelos de punta, ya que relata con extrema minuciosidad la apoteosis de la corrupción que constituye ese "Sistema de facturación y Financiación" de los actos del PP y su Grupo parlamentario valenciano, detallando con pormenores facturas, pagos efectuados y conversaciones telefónicas que desnudan el repertorio de trapicheos, marranadas, sobornos, cohechos propios e impropios y latrocinios sin fin de esta amplia tribu de chorizos con corbatas en tonos pastel. Pura pornografía dura, protagonizada y producida por una variopinta y numerosa manada de casposos emprendedores y politicastros con gomina, zafios y garrulos a más no poder; hay que leer cómo se expresan por teléfono cuando se creen a salvo de oídos investigadores.

Para no marearles con datos, les remitiré directamente a las Conclusiones (págs. 25 y siguientes). Se dicen ahí cosas como éstas: "no existe una explicación lógica del motivo por el cual distintas empresas de la construcción y/o servicios (...), que resultan adjudicatarias de numerosos contratos públicos en dicha Comunidad (valenciana), efectúen el pago de distintas Facturas a la mercantil Orange Market SL, cuyo importe íntegro pasa a descontar la deuda existente entre ésta Sociedad y el Partido Popular de la Comunidad Valenciana, así como su Grupo Parlamentario en las Cortes Valencianas, salvo que exista contraprestación o favorecimiento de algún tipo, entre dichas empresas, y la formación política expuesta, sistemática de funcionamiento que se repite a lo largo del tiempo".

Ya ven pues: "importe íntegro" que pasa de los adjudicatarios de contratos al Partido Popular vía Orange Market (la principal sociedad-centro de operaciones de la trama Gürtel en Valencia), "sistemática de funcionamiento que se repite a lo largo del tiempo". Casi nada. Nada en realidad, oyendo a los Camps, Barberá, Rajoy y resto de la banda.

Claro que en esa trama de hiper-corrupción el dinero sucio no siempre circula en el mismo sentido de la marcha. Por ejemplo, ante las "dificultades contables de liquidez" que atravesaba Orange Market en 2008, el PP le inyectó directamente centenares de miles de euros. Lean: "La Sociedad Orange Market SL, recibe de la formación política Partido Popular de la Comunidad Valenciana sin justificación contractual de ningún tipo, entre el 04/02/2008 y el 12/09/2008, la cantidad 405.450 Euros, que pasan a engrosar la Caja B de dicha mercantil". Cuatrocientos mil euros que el PP entrega a la empresa-faro de la trama Correa "sin justificación contractual de ningún tipo".

Quedan pues establecidas las partes de la trama. A los principales actores les conocemos ya a casi todos, sean políticos o empresarios. Queda una pregunta por resolver: ¿de dónde sale todo este diluvio de dinero?.

En su primer viaje a Nueva York, el escritor catalán Josep Pla, al ver desde la ventanilla del avión las innumerables luces de la ciudad, preguntó a su acompañante con retranca de pagés: "¿quién paga todo esto?". Esa es la pregunta ahora: ¿Quién paga la trama Gúrtel-PP?. Sabemos que en Gürtel y ramificaciones valencianas hay constructores-especuladores inmobiliarios, empresas de servicios (variados servicios; alguno relacionado con la prostitución, por ejemplo), ejecutivos y políticos de nariz blanqueada los sábados por la noche y misa matinal los domingos al mediodía... Bueno, no es difícil intuir que la fuente originaria esté (presuntamente ¿eh?; faltaría más) en el blanqueo de capitales provenientes del narcotráfico.

¿Se investigará en esa dirección? Seguramente acabará siendo inevitable que así suceda.

Les dejo el acceso al documento íntegro, que hoy se encuentra en la web de El País. Apresúrense, el PP ya ha anunciado que se querellará contra los medios que publiquen el informe policial. ¿Cabe mayor descaro?.

En la fotografía que ilustra el post, Mariano Rajoy saluda a los asistentes a un mitin en Valencia durante las elecciones generales de 2008. Delante de Rajoy, la cabeza política visible de la trama de corrupción valenciana: el presidente autonómico, Francisco Camps. A su izquierda, a la altura de la axila del presunto líder de la derecha española está Álvaro Pérez alias El Bigotes, propietario de Orange Market, la empresa que gestionaba la corrupción en el País Valenciano por cuenta del Partido Popular.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ya no hay palabras suficientes para calificar a estos sinvergüenzas y encima chulos.
Lo que es ¡¡terrible!! es que esta gentuza nos llegue a gobernar de nuevo. ¿Es que el español-votante no se entera de cómo y cuánto nos roban?, ¿Es que no les importa poner en manos de estos inmorales "sin complejos" a todo un pais?.
Siento terror ante la idea de ver a estos ladrones detectando el poder.

Marian

JMBA dijo...

Me parece claro que una de las asignaturas pendientes de esta democracia es la financiación de los partidos políticos. Esto les "obliga" a buscarse la vida, y a sumergir dineros fuera de la vista. Y en las cloacas, el dinero se mueve en cualquier dirección sin control alguno.

Espero que, si el PP se empeña en mantener al equipo actual como candidatos, los ciudadanos valencianos sean suficientemente responsables como para votar hacia otro lado.

Contra la corrupción, tolerancia cero.

Un saludo (y gracias por el enlace al documento, que revisaré como si fuera una novela de espías)

José María

Sergio dijo...

Pues lo que me asusta a mí es que ellos pensarán "Observen amigos, robamos, nos pescaron y nos votaron" y comenzarían a meterse pedazos de España enteros en el bolsillo.