
El profesor Ramón Cotarelo ha subido un post a su blog (el enlace a éste lo encontrarán en la barra vertical de la derecha, apartado "Voces"), con el que lamentablemente tengo que discrepar de modo radical en algunas de sus afirmaciones. El post de Cotarelo hace referencia a esta ceremonia de la confusión que se ha desatado en todo el mundo, aunque especialmente en Europa y EEUU, con motivo del paso por varias ciudades de la llama con el fuego olímpico que teóricamente arderá en Pekín durante los Juegos Olímpicos de este verano.
Mi discrepancia fundamental radica en que, efectivamente, contra la opinión de Ramón y como está probado hasta la saciedad, Tibet era hasta la anexión a China (años cincuenta del pasado siglo) una teocracia feudal en la que los campesinos eran propiedad de los monasterios y la vida de un siervo valía menos que la de un animal de trabajo.
Lejos de mí defender el maoísmo y menos todavía el corrupto y brutal "mix" de comunismo y capitalismo hoy "realmente existente" -como decía, con cierta suficiencia de intelectual orgánico psuquero, Manuel Vázquez Montalbán- en la antaño llamada China Popular, pero sí es cierto que la ocupación china supuso la entrada de Tíbet en el siglo XX, del mismo modo que la ocupación soviética de Afganistán sacó a ése país del feudalismo medieval (aunque luego viniera lo que todos ya sabemos).
Discrepo también con el profesor Cotarelo en relación con el asunto de las campañas "proTíbet", que desde hace medio siglo sí organiza la CIA y algún que otro servicio secreto menos nombrado, aunque mi admirado Ramón sostenga contra toda evidencia que no es así. Lo que no significa en absoluto que todos quienes se manifiestan por la "libertad del Tíbet" sean agentes de la CIA, ni mucho menos; entre ellos seguro que hay un porcentaje de personas de buena voluntad y -átenme esa mosca por el rabo- un buen puñado de agitadores a sueldo de los servicios secretos chinos, al modo como en Cuba se dice que en la llamada "oposición interior" quien no trabaja para la CIA trabaja para el G-2 cubano, y algunos cobran de ambos servicios a la vez.
En cuanto a "Su Santidad" el Dalai Lama, debo recordar que este caballero estuvo en nómina del gobierno chino durante años, gobernando una especie de régimen autónomo, hasta que una rebelión no autorizada por él -¿quizá propiciada por los propios chinos?- le obligó a huir a la India. A mí este tipo me parece un indeseable y un farsante.
Y en fin, respecto a los shows que viene organizando Reporteros Sin Fronteras (RSF) al paso de la antorcha olímpica que va a China, yo les animaría a repetirlos cada cuatro años, cada vez que se produzca una de estas ceremonias, porque no hay país en el mundo -ninguno, Ramón- que no merezca un buen boicot internacional. ¿Veremos a RSF en 2012 boicotear el paso de la llama olímpica porque el país (Gran Bretaña) y la ciudad (Londres) donde se celebrarán siguen (y seguirán probablemente) con la mierda de la guerra de Irak hasta las cejas, y violando los derechos civiles de sus propios ciudadanos con una "legislación antiterrorista" calcada de la terrorista Patriot Act norteamericana? Lo dudo mucho.